La sabiduría popular
es implacable: “Lo barato sale caro”. Cuando se trata de procedimientos
plásticos y/o estéticos no hay que escatimar en gastos y se debe elegir lo mejor dentro
de un presupuesto sensato. No necesariamente lo más caro es lo mejor, ni
siempre lo mejor es lo más caro, pero las características individuales de cada
paciente son las que determinarán que tipo de procedimientos son los que le favorecen y a los
que su fisiología mejor responderá y estas son decisiones que sólo un profesional
íntegro e idóneo puede y debe tomar.
Cuando se trata de
cirugías estéticas, elegir el sitio donde se va a realizar es tan importante
como elegir el especialista que la va a llevar a cabo.
En nuestra querida
Montería, el “boom” de la cirugía plástica no ha sido esquivo, contamos con
unos excelentes cirujanos y unas excelentes instalaciones para practicar dichas
cirugías, sin embargo, hay personas que no están preparadas para realizar estos
procedimientos y mediante engaño “cautivan” a sus pacientes. En la página de
internet de la Sociedad Colombiana de Cirugía Plástica, Estética y
Reconstructiva (SCCP) www.cirugiaplastica.org.co se puede consultar quiénes son
los cirujanos plásticos acreditados por esa Sociedad en nuestra ciudad. Son los doctores Sebá, Vellojín, Zakzuk, Berrocal, Cumplido, y Jesús Castillo. Adicional a los seis ya mencionados, sólo hay dos especialistas en Cirugía
Plástica más en nuestra ciudad cuya vinculación a la SCCP está en curso y por lo tanto aún no
figuran en ese listado, son los doctores Juan Camilo Quintana y Alexandra Otero.
La Medicina Estética
no es lo mismo que la Cirugía Plástica, ni los especialistas en Medicina
Estética o Médicos Generales pueden realizar cirugías. Esto lo dejó claro la
Resolución 1441 de mayo de 2013, sólo los médicos especialistas QUIRÚRGICOS
podrán realizar Cirugías Estéticas. Asimismo, los centros de belleza, spas,
salones de masajes, etc, NO son los sitios idóneos para realizar cirugías de
ningún tipo o procedimientos invasivos de gran superficie. Los especialistas en
Cirugía General tampoco son los profesionales idóneos para ejecutar
procedimientos estéticos, pues no tienen la formación para resolver las
posibles complicaciones de las cirugías plásticas y para todos estos
procedimientos siempre se deberá contar con un Anestesiólogo con su respectivo
equipo y quirófano debidamente habilitado ante la Secretaría de Salud
departamental.
En Córdoba han ocurrido
casos con complicaciones muy serias, producto de la práctica fraudulenta de la especialidad en Cirugía Plástica. A pesar de las denuncias legales y uno que otro reporte
periodístico, los órganos de control en materia de Salud Pública no han
sancionado a los responsables.
El año pasado hubo una muerte por Imprudencia e Impericia, el “profesional” que realizó temerariamente los procedimientos no remitió a la paciente a manos calificadas y mucho menos a un servicio apto para tratar sus complicaciones, y aún así ni la famosa sanción social ha logrado evitar que ese “profesional” siga “ejerciendo”.
El año pasado hubo una muerte por Imprudencia e Impericia, el “profesional” que realizó temerariamente los procedimientos no remitió a la paciente a manos calificadas y mucho menos a un servicio apto para tratar sus complicaciones, y aún así ni la famosa sanción social ha logrado evitar que ese “profesional” siga “ejerciendo”.
Hago un llamado a los
colegas especialistas e instituciones certificadas y a las víctimas de estos
teguas de la cirugía, para que denuncien los casos de que tengan conocimiento.
También hago un llamado a las autoridades en materia de Salud para que con
sanciones ejemplarizantes eviten que sigan los desenlaces desafortunados.